Encuentro N.º 7
La Santísima Virgen María (Advocaciones)
Oración
Proclama
mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;
porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas
las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es
santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación.
El hace proezas con su brazo: dispersa a los
soberbios de corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece a los
humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la
misericordia -como lo había prometido a nuestros padres- en favor de Abrahán y
su descendencia por siempre.
María al conocer el plan de Dios, solo responde: “He aquí la esclava del Señor,
hágase en mí según tu palabra” (Lc. 1,38)
Los humildes no buscan ser ensalzados. Nunca se lee en el Evangelio que María se presentase en público, cuando Jesús era recibido en triunfo, más sí lo acompañó, incluso en el calvario.
FE Y ESPERANZA
María pronta a servir va a visitar a su prima Isabel.
Una madre no tiene mayores enemigos que los que atormentan y dan muerte a su Hijo, María al pie de la cruz ruega a Dios por los verdugos de su Hijo e implora la conversión, el perdón y la gracia de Dios para ellos.
EL AMOR A DIOS
El amor a Dios fue incomparable del amor de María a otras personas, conoció la bondad, hermosura y perfección de Dios, cuanto más las conocía más las amaba, no hubo criatura que hubiese conocido más perfectamente a Dios que María, nadie recibió tantas gracias como María y nadie es tan agradecido con Dios como Ella, el amor era sin límites ni medida de ambas partes.
“María será virgen y madre a un mismo tiempo; será bendita entre todas las mujeres y bendito el Fruto de sus castas entrañas” (San Bernardo).
PIEDADLa piedad es tener la voluntad pronta y fervorosa por todo aquello que nos encamina al servicio de Dios.
Después de que el ángel le dio el anuncio a la Virgen, ella profundizó más en su recogimiento e hizo más fervorosa su oración.
Si no hubiera sido por la fuerza que le daba la oración que hacía, ella también hubiera muerto al estar al pié de la cruz.
LA SABIDURÍA
Hoy se ha perdido el amor al silencio y a la reflexión profunda, así el hombre no puede encontrarse con Dios ni consigo mismo; María en la anunciación “
se inquietó por estas palabras y pensaba que significaría aquel saludo” (Lc. 1,29) y ella “guardaba todas estas cosas en su corazón”. (Lc. 2, 19); Así nos invita a no dejarnos llevar por los sentimientos sin antes tener una reflexión profunda.LA PACIENCIA Y FORTALEZA EN EL DESTIERRO Y EN EL DOLOR
María con fortaleza afronta las penalidades, no duda en huir a Egipto por su hijo, permanece firme en el dolor. Ejemplo de paciencia y serenidad.
La paciencia nos hace soportar con resignación y calma los males de esta vida, persecuciones, injurias, pérdida de bienes, enfermedades y hasta la muerte.
¡Cuánto podríamos aprender todos de la Virgen! Si María fue santa en el hogar, en el trabajo diario, podríamos todos tratar de imitar sus VIRTUDES para santificarnos día tras día nosotros también.
¿Te imaginas qué dolor habrá pasado nuestra Señora al ver morir así a su hijo?
La Virgen nos enseña a sufrir con paciencia y fortaleza las penas y dolores de la vida.
Muchas veces estos sufrimientos, aceptados y ofrecidos, nos ayudan a acercarnos a Dios y a ganar más fácilmente la vida eterna.
Comentarios
Publicar un comentario